Curiosamente dos de los edificios que más me impactaban de niña en Barcelona fueron diseñados por el mismo arquitecto, Enric Sagnier i Villavecchia.
El primero que os muestro es la Casa Arnús, también conocida como El Pinar, de 1903. Está situada en Collserola y se puede ver de camino al Tibidabo, pero por desgracia no se puede visitar, ya que es una finca privada.
Cuando era pequeña y pasaba por allí con el coche, siempre la miraba como si me hubieran dejado asomar la cabeza a un cuento y me imaginaba que paseaba por allí. Se convirtió en mi casa preferida. La primera foto es de Internet, pero la de la derecha la tomé hace un par de años cuando subí a tomar algo por allí arriba. Esa es la puerta donde comienzan los jardines.
En los años veinte, Sagnier construyó otro magnífico edificio por el que también acostumbraba a pasar de pequeña, el Patronato Ribas. Así como el anterior tiene toques góticos y se ve claramente la inspiración medieval, aquí tenemos un estilo barroco, que a pesar de no ser mi preferido, en este caso impresiona al ser tan grande y más aún al albergar un orfanato.
Cada vez que pasaba por delante me imaginaba lo que estarían pasando aquellos huérfanos, qué harían allí dentro. También funcionaba como internado para niños con padres. Actualmente ya no es orfanato, sino un centro de enseñanza secundaria, IES Vall d'Hebrón, y sí se puede visitar. La primera foto es de los años 50, cuando alrededor no había nada más que montaña; la última es actual.
¡Qué bonita entrada! El primer edificio lo conozco (aunque no al natural) pero el segundo no y su historia y aspecto me han parecido curiosísimos. Tendré que hacer una "peregrinación" :)
ResponderEliminarLa arquitectura y Barcelona tienen mucho que decir...Lo mismo que Cristina, pero en mi caso con mochila en la espalda...tendré que escaparme y visitar esas casas tan bonitas...
ResponderEliminarTienes suerte de una ciudad que tiene casi una historia en cada casa y una casa para cada historia. Yo encantada, que a mí la arquitectura casi como el chocolate XD!
ResponderEliminarUn pilar de besotes
Qué pasada de lugar Tanakil...
ResponderEliminarCuando queráis os acompaño a visitarlo :-) Así nos conocemos en persona.
ResponderEliminarUn saludo a todas,
Tanakil.
Definitivamente parecen lugares de cuentos...que bonito!
ResponderEliminarAh!! 2 puntos para ti, la sirena en la luna es de David Delamare.
Un beso
¿Sabes más sobre mi instituto?
ResponderEliminarEl edificio que antes era un orfanato.
Anónimo: Cuando busqué datos sobre el Orfanato Ribas, encontré estos enlaces, pero sé que el instituto te puede dar mucha información (por lo que he leído en Internet):
ResponderEliminarhttp://www.20minutos.es/museo-virtual/foto/2076/tag/escolares/4/#comentarios
http://www.xtec.es/~allaurad/vallhebron.htm
Un saludo,
Tanakil.
Otro edificio modernista de Enric Sagnier, La Rotonda, está afectado por un plan urbanístico que prevé el derribo del 80% del volumen original.
ResponderEliminarLos vecinos se oponen al proyecto y han montado la Plataforma La Rotonda.
web: http://www.larotondabarcelona.com
Microdocumental:http://www.youtube.com/watch?v=qMmhk8zVz20
Realmente, la mires desde donde la mires, la Casa Arnús parece salida de un cuento o una novela de misterio.
ResponderEliminarRecientemente hice esta fotografía de la casa donde vuelve a parecerme de novela.
http://www.otrabarcelona.com/casa-arnus/
Un saludo.
Otra Barcelona: Gracias por la fotografía, es muy misteriosa :-)
ResponderEliminarTienes razón, esa casa es de cuento de hadas. Me encantaría verla por dentro, pero me han comentado que es una vivienda particular.
Saludos,
Noemí.
Preciosa entrada; gracias por compartir tus tesoros de la infancia.
ResponderEliminarEs curioso lo que dices sobre cómo sin saberlo ya de pequeña percibiste la unión entre los dos edificios. Creo que hay un hilo invisible que une entre sí lo que nos gustaba en la niñez. Y luego, con el paso del tiempo, descubrimos las conexiones y que no había nada de azar en nuestras afinidades.
Gracias, de verdad.