28.12.13

MOMO

La edición del 84 que yo tengo
En 2013 la novela Momo o La extraña historia de los ladrones del tiempo  y de la niña que devolvió el tiempo a los hombres ha cumplido cuarenta años y para rendirle un pequeño homenaje le dediqué una tertulia. ¿Por qué online? Diciembre es un mes difícil por tantas festividades e Internet ofrecía más flexibilidad para hablar de este libro durante más días, cuando a los interesados les fuera mejor. Además, fue una nueva oportunidad para que aquellos que están lejos pudieran participar.

Rondaba por casa en los ochenta, pero nunca me decidí a leerlo a diferencia de La historia interminable que devoré con diez años. No obstante, sí llegué a ver la película, que recuerdo con sabor agridulce porque decía mucho, pero sólo era consciente de algunas partes y otras me daban miedo, el miedo que da la realidad no algo imaginado.

Michael Ende tardó seis años en escribir Momo. Lo empezó antes de su traslado a Roma, pero la mayoría de la novela la escribió en Italia. No sé por qué, puesto que parece bastante evidente por el anfiteatro y algunos nombres de los personajes, nunca relacioné la historia con aquel país, tal vez porque parece posible que pueda suceder en cualquier parte del mundo. 

Momo es una niña huérfana, desaliñada, que vive en las ruinas de un anfiteatro y que posee una cualidad que
Una edición holandesa
atrae a muchas personas y la ayuda a encontrar grandes amigos: saber escuchar. Un día algo comienza a cambiar en su entorno que transforma a las personas. Han aparecido los hombres grises, que se apoderan del tiempo de las personas y Momo es la única que puede detenerlos porque a ella no saben cómo engañarla, no tienen qué ofrecerle a cambio de su tiempo.


A veces una hora puede parecer una eternidad, y otra, en cambio, pasa en un instante; depende lo que hagamos durante esa hora.
Porque el tiempo es vida. Y la vida reside en el corazón.Y cuanto más ahorraba de esto la gente, menos tenía.

Los mejores amigos de la protagonista son Gigi, un guía turístico falso que se inventa historias para los turistas y Beppo, un barrendero al que la mayoría de gente considera loco, pero en realidad es un sabio. 

Nos he reconocido, dice Beppo en el capítulo 4. Chema, David, Gloria y yo estuvimos debatiendo sobre esta escena, puesto que es sumamente enigmática. ¿Acaso hace referencia a la reencarnación? Coincidimos en que todos pensamos en ello. El barrendero dice en la traducción que ve unas piedras de otro color colocadas en forma de T. ¿Se refiere al tiempo? ¿Qué letra ve en la versión alemana, la Z de Zeit

¿No sería hora de empezar a ahorrar? Se trata, simplemente, de trabajar más deprisa y dejar de lado todo lo inútil. En lugar de media hora, dedique un cuarto de hora a cada cliente. Evite las charlas innecesarias. La hora que pasa con su madre la reduce a media. Lo mejor sería que la dejara en un buen asilo, pero barato, donde cuidaran de ella, y con eso ya habrá ahorrado una hora. Quítese de encima el periquito. No visite a la señora Daria más que una vez cada cinco días, si es que no puede dejarlo del todo. Deje el cuarto de hora diario de reflexión, no pierda el tiempo en cantar, leer, o con sus supuestos amigos.



Una edición americana
¿No os recuerda a algo este pasaje? Más bien ¿a quién os recuerda? Tanto parecido con el objetivo de algunas personas de nuestra realidad asusta.

Los hombres grises viven del tiempo de los hombres, pero ese tiempo muere literalmente cuando se lo arranca a su verdadero propietario, porque cada hombre tiene su propio tiempo y sólo mientras siga siendo suyo se mantiene vivo.

Estos individuos dicen ser los representantes del Banco del Tiempo e intentan convencer a la gente de que les entregue su tiempo para ahorrarlo, pero en realidad quieren consumirlo ellos para seguir existiendo. El maestro Hora, en cambio, es el administrador del tiempo de los hombres. Se encarga de dar a cada uno el tiempo que tiene destinado. La escena de las flores horarias es realmente maravillosa, con un colorido excepcional que me recordó en cierta manera al que describe en Goab.

Mi personaje preferido es Casiopea, la tortuga que ayuda a la niña, y además del mensaje que nos transmite el escritor con este estupendo texto, coincido con muchas de las ideas que refleja en la novela. Como dije en la tertulia, creo que Michael Ende y yo hubiéramos sido grandes amigos. 


Eso no son casas... eso son... eso son almacenes de gente.


Una gran crítica de la sociedad de cuando fue escrito que sigue pudiéndose aplicar a nuestra época. Una novela atemporal. 


Todas las ilustraciones que aparecen en la edición original son obra de Michael Ende.

La única crítica negativa es sobre la edición de Alfaguara de 1984, que espero esté revisada y corregida en la actualidad. La traducción de Susana Constante tiene algunas frases que suenan extrañas en castellano, por ejemplo "la realidad era muy otra" -yo habría optado por "la realidad era muy distinta",  o "cuando por fin se vio que no había más retrasados" (refiriéndose a los que llegaban tarde) donde yo hubiera puesto "rezagados". También encontré bastantes errores ortotipográficos, que tengo anotados si algún editor está interesado.

24.12.13

La Navidad de Connie Willis

El libro del Día del Juicio Final me gustó especialmente cuando lo leí en la adolescencia y el año pasado decidí leer los relatos que esta escritora de ciencia ficción había dedicado a la Navidad. La mayoría de los que presenta en su recopilación Miracle and Other Christmas Stories no me dijo nada especial, pero hubo un cuento que me pareció realmente bueno, En la tienda de juguetes de Coppelius.


Un hombre liga con una compañera de la oficina y descubre al cabo de un mes que esta tiene un niño de cinco años. La mujer debe marcharse a ver a su madre que ha sufrido un ataque al corazón y le pide que lleve a su hijo a una tienda de juguetes donde lo recogerá una amiga.
Parece sencillo, aunque a él le fastidia bastante cuidar del pequeño, a pesar de ser sólo por unas horas. La tienda está llena de gente y mientras esperan fuera, al niño le entra frío y pis, pero el protagonista le dice que se aguante. Una dependienta disfrazada de Caperucita Roja coge al niño, que ya no puede más, y lo lleva a los almacenes; el hombre se ha despistado y no ha visto por dónde se han ido.
Entra en la tienda para buscarlos, pero todo es demasiado grande y confuso, y queda atrapado ¿para la eternidad?
Es un relato sobrecogedor. La autora consigue trasmitir la angustia del protagonista y nos traslada a una tienda masificada, llena de niños jugando, correteando, llorando porque se han perdido. Entre la multitud, la preocupación del protagonista va aumentando, ya no sólo porque no consigue dar con el hijo de su ligue, sino porque parece hallarse en un laberinto sin salida. Y lo verdaderamente asfixiante es cuando se da cuenta de que no podrá salir jamás de allí, aunque con el consuelo de que el niño ha encontrado a la amiga de su madre. Pero a él ya nadie lo oye dentro de la torre del castillo de Rapunzel...

9.12.13

Giftzwerg

A diferencia del inglés, Gift en alemán no es un regalo ni un don, sino que significa "veneno". La traducción de Giftzwerg a su lengua prima sería bastante literal, poison dwarf, que en el Urban Dictionary definen como una "persona egoísta, de poca confianza, detestable o maligna, cuyo aspecto aparentemente inofensivo le permite satisfacer su propensión a causar dolor y sufrimiento de manera taimada a cualquiera que tenga la desgracia de entablar amistad con ella". En el diccionario Pons nos lo traducen como "víbora", en el Reverso , "enano rencoroso", y hace un tiempo en una lista de traductores propusieron "bichejo", pero esta última opción me resulta un tanto suave. ¿Qué opináis vosotros? ¿Es una persona con mala leche? A mí me gusta "enano infernal".
Los enanos pueden resultar entrañables como Willow u odiosos como Rumpelstiltskin. Personalmente, los enanos de la Tierra Media que inventó Tolkien son unos de los que menos me gustan y tal vez sí me referiría a ellos como Giftzwerge.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...